Como artista emergente, Ludwig Medina representa el arte como una expresión para transmitir emociones en experiencias personales tal como se manifiesta en sus exposiciones individuales. Su enfoque ha evolucionado desde la "escalera de tijera" en En ascenso , en la que representa el largo viaje para lograr su maestría, hasta Formas deliberadas , en el que representa anécdotas durante y después del huracán María. En la mayoría de sus obras de arte, Ludwig trabaja con pintura de barra de aceite, lo que le permite trabajar en una variedad de superficies. Una por una, sus piezas contienen una historia que lo libera de las emociones internas. Juega con los títulos de la obra de arte para darle al espectador una pista de tiempo y lugar; Sin embargo, es a través de la abstracción que Ludwig ha encontrado una manera relajante de compartir la historia de su vida.